El auge de vehículos eléctricos y nearshoring impulsan la demanda de cobre en Sonora

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Hermosillo, Sonora — En un contexto de creciente demanda de minerales y condiciones favorables del mercado, el cobre de Sonora se presenta como un recurso clave, especialmente impulsado por el nearshoring y la producción de vehículos eléctricos. Sin embargo, el sector minero enfrenta desafíos significativos en el ámbito legal y regulatorio.

David Ramos Félix, presidente de la Asociación de Ingenieros de Minas, Metalurgistas y Geólogos de México en Sonora, destacó que la transición energética hacia vehículos eléctricos y energías limpias está incrementando la demanda de cobre. «Para la producción de un automóvil eléctrico promedio se requieren casi 100 kilos de cobre, en comparación con los 25 kilos necesarios para uno regular», señaló Ramos Félix en el foro Retos de la Minería Mexicana organizado por El Economista.

Sonora produce más del 70% del cobre a nivel nacional, consolidándose como un actor principal en la industria minera del país. Este metal es crucial para la transición hacia energías limpias debido a su alta demanda en la generación de energía solar, eólica y bioenergía. Además, la creciente producción de vehículos eléctricos, que requieren significativamente más cobre que los vehículos de combustión interna, está impulsando aún más esta demanda.

«La transición hacia energías limpias y el incremento en la producción de autos eléctricos representan una oportunidad significativa para Sonora», explicó Ramos Félix. La entidad alberga importantes operaciones minero-metalúrgicas, como Buenavista del Cobre, La Caridad, Pilares y Piedras Verdes, que son esenciales no sólo para la producción de cobre, sino también para la economía regional y nacional.

En 2023, el cobre aportó el 27.7% del valor de la producción total de la minería no petrolera en México, posicionándose como el segundo mineral más valioso después del oro, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Desafíos y riesgos

A pesar de las buenas condiciones del mercado, la minería en Sonora enfrenta desafíos significativos, especialmente en el ámbito legal y de regulación. La incertidumbre legislativa y la falta de claridad en las políticas gubernamentales están frenando el avance de nuevos proyectos y la inversión extranjera. «La certeza jurídica y las condiciones favorables son cruciales para atraer inversiones y desarrollar la cadena de valor del cobre y otros minerales en el estado», afirmó Ramos Félix.

La relocalización de empresas y el nearshoring presentan oportunidades para la minería en Sonora. No obstante, aunque ha habido acercamientos y reuniones con el gobierno y asociaciones, aún no se ha visto una transición concreta hacia nuevos proyectos. «Estamos trabajando con el sector educativo, empresarial y gremial para buscar soluciones y promover la minería en Sonora», agregó.

Respecto a la iniciativa legislativa para prohibir la minería a cielo abierto, Ramos Félix advirtió sobre el impacto devastador que tendría en la economía y el empleo de la región. «Sonora depende significativamente de este tipo de minería, que constituye alrededor del 90% de la actividad en la región y sostiene 146,000 empleos directos e indirectos», alertó.

La minería de cobre en Sonora es esencial no sólo para la economía del estado, sino también para la economía nacional y la transición hacia energías limpias. Con políticas y estrategias adecuadas, Sonora puede impulsar un desarrollo sostenible, asegurando su posición como líder en la producción de cobre y como pilar económico clave para México.

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