A un año del hallazgo del cuerpo de Debanhi Escobar en una cisterna del motel Nueva Castilla en Escobedo, Nuevo León, aún no hay avances significativos en la investigación, lamentaron sus padres, Dolores Bazaldúa y Mario Escobar.

Sin embargo aseguraron que están cerca de dar con los presuntos responsables de arrebatarle la vida a su única hija, quien tenía 18 años y era estudiante de la licenciatura en Derecho.

«Se tiene que esclarecer, yo dije que estamos cerca de encontrar a los presuntos culpables, estamos cerca. Los están protegiendo, por eso no se ha aclarado nuestro caso», recalcó la madre de la víctima.

Para reiterar la exigencia de justicia por el feminicidio de la joven, sus padres acompañados por colectivos, familiares, amigos y allegados de otras víctimas de feminicidio, marcharon hacia la Fiscalía y Centro de Justicia para la Mujer de Nuevo León, para después trasladarse hacia el motel Nueva Castilla, donde a decir de Mario Escobar, fueron «plantados» los restos de su hija tras 13 días desaparecida.

«Es un feminicidio, a Debanhi la mataron, a Debanhi la sembraron y la plantaron, es un feminicidio. Que sepa todo el mundo. Que estamos cansados y hartos de la impunidad que hacen las fiscalías locales y que la Fiscalía General de la República se ponga a hacer su trabajo”, enfatizó Mario Escobar.

Fue la madrugada del 9 de abril de 2022 la última vez que Debanhi fue vista con vida en la carretera de Monterrey-Nuevo Laredo, donde se bajó del taxi que presuntamente la llevaría a su casa después de asistir a una fiesta con Sarahí e Ivonne, sus supuestas «amigas».
Mientras estaba de pie en dicha autopista, el chofer le tomó una fotografía que horas más tarde se viralizó y su caso alcanzó cobertura nacional e internacional.